Conjuntivitis: Qué es y cómo curarla en casa
Compresas
La higiene es un factor clave en la atención de la conjuntivitis, ya que evitará la progresión de la infección y así el paciente sentirá un mayor alivio; una forma de contribuir con esto es aplicando compresas, preferiblemente elaboradas una tela libre de pelusas, remojadas en agua tibia. Aplica estas compresas sobre los párpados para sentir alivio; si la conjuntivitis está presente únicamente en uno de los ojos, se recomienda no aplicar la misma compresa al otro ojo, pues así se reducirá la posibilidad de que la infección se irradie.
El reposo ayudará con la conjuntivitis
Si la infección es bacteriana, y el paciente se encuentra en posibilidades de tomar reposo un par de días, se recomienda que permanezca en casa para evitar la exposición al sol y a contaminantes que pudieran causar más irritación. Además, esto permitirá que pueda aplicarse compresas de agua tibia varias veces al día y evitar utilizar maquillaje o lentes de contacto, que podrían provocar sensación de ardor e incomodidad en la zona ocular.
Elimina el pus de la conjuntitivis
Si la infección es de origen bacteriano, se recomienda evitar tocar la zona y lavarse las manos de manera seguida. En los casos de conjuntivitis moderadas, es posible que el paciente presente una descarga de fluido ocular. Este tipo de fluido, o pus, no debe de representar una señal de amenaza para el paciente, pero sí es necesario limpiar cuidadosamente la zona para retirar de manera delicada todo el fluido, especialmente durante las mañanas, cuando su consistencia es más dura.
Evita tocarte los ojos
Como se ha mencionado, la higiene es clave para mantener una buena salud ocular y ayudar a reducir los síntomas de la conjuntivitis; lo mejor es evitar tocarse los ojos y mantenerlos cerrados tanto tiempo como sea posible al tiempo que se colocan compresas tibias. Uno de los principales síntomas de la conjuntivitis es la irritación y la sensación de ardor o picazón en los ojos, pero frotar la zona podría causar problemas más graves o permanentes.
Gotas lubricantes
Uno de los remedios más convencionales para el tratamiento de la conjuntivitis en casa es el uso de gotas lubricantes, que ayudan a mantener el ojo hidratado y a reducir la inflamación ocular. Este tipo de gotas tiene la misión de aminorar las molestias relacionadas con la conjuntivitis y desechar con mayor facilidad los alérgenos, irritantes y descargas de pus en los ojos.
Aceites esenciales
El uso de aceites esenciales es una buena opción para calmar las molestias ocasionadas por la conjuntivitis, pero nunca deben de aplicarse directamente en los ojos, sino únicamente en las zonas exteriores. Se recomienda diluir el aceite esencial de lavanda y aplicarlo al menos a una distancia de ½ pulgada de los ojos (por debajo de la cejas y de las mejillas); uno de los principales efectos es una sensación de alivio ante la picazón.