Buscar
Aprieta "Enter" para buscar o "ESC" para cerrar.

La ola migratoria continúa en la frontera norte de México

La presión migratoria en la frontera norte de México continúa en urbes mexicanas como Ciudad Juárez y reflejan la intención (...)
2021-06-14T16:04:27+00:00
Suscríbete a Nuestro Boletín
Recibe por email las noticias más destacadas
Shutterstock
  • Los migrantes no paran de llegar desde la frontera norte de México
  • Desde que el gobierno de Trump terminó, más y más inmigrantes llegan a EE.UU.
  • Se llevan a cabo reuniones de personas que habían sido separadas de sus familias por el gobierno de Trump

Ciudad Juárez (México), 13 jun (EFE News).- La presión migratoria en la frontera norte de México continúa en urbes mexicanas como Ciudad Juárez y reflejan la incesante ola que vive la región, que en mayo registró un nuevo máximo de más de 180.000 indocumentados arrestados por Estados Unidos. Enrique Valenzuela Peralta, coordinador general del Consejo Estatal de Población en Ciudad Juárez aseguró este domingo a Efe que la ola migratoria se ha presentado a partir de febrero «y ha generado desafíos en espacios humanitarios». La declaración contrasta con las del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien el pasado 31 de mayo aseguró que, después de que marzo fue un mes «muy crítico» en cuanto a deportaciones, «ya ha bajado» la migración. «Todavía falta, pero sí se está avanzando, ya no está como en marzo, ha ido bajando, poco, pero ha ido bajando», afirmó.

Sin embargo, los números indican que, a pesar de los esfuerzos de las autoridades mexicanas y estadounidenses, continúa la crisis migratoria. Ante este panorama, el presidente norteamericano, Joe Biden, encargó a finales de marzo a la vicepresidenta Kamala Harris la tarea de frenar la migración. Con este propósito, el 7 y 8 de junio pasados, Harris realizó un viaje a México y Guatemala, donde pidió a los migrantes a «que no vengan» a Estados Unidos. Además, mostró sintonía con el Gobierno mexicano para «atender las raíces de la migración». Incluso, anunció asistencia de Washington para generar 250 millones de dólares en inversiones en el sur-sureste y la colaboración para frenar a los «polleros», como se conoce en México a quienes trafican con migrantes.

ALBERGUES SATURADOS

Shutterstock

Valenzuela Peralta señaló que la demanda de los espacios para albergar migrantes ha llevado habilitar otros inmuebles, como el gimnasio «Kiki Romero», en Ciudad Juárez. Afirmó que aún existe mucha desinformación sobre el cierre de la frontera entre México y Estados Unidos y hay quienes dan fechas falsas a los migrantes de su apertura.

«Debemos tener la información precisa para estar seguros», insistió. El pasado lunes, el Instituto Nacional de Migración (INM) de México informó de la detención de 90.850 migrantes indocumentados en lo que va del año, de los que ha deportado a casi la mitad, 42.067. Mientras que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, en inglés), informó el pasado 9 de junio que, en mayo, 180.034 migrantes fueron arrestados en la frontera, un récord en un mes, y de ellos 112.302 fueron deportados de inmediato bajo el argumento de la crisis por la pandemia.

UN REFUGIO QUE TIENDE LA MANO

Ayuda en la frontera
Shutterstock

El albergue el Buen Samaritano es uno de los refugios que brinda protección a los migrantes. Su director, Juan Fierro García, afirmó que han notado un incremento en el flujo migratorio. «Hay ocasiones en las que hemos tenido 105 indocumentados, ahorita en una semana llegaron 52», dijo. Esto parece ser resultado de la ola migratoria sin precedentes que vive la región; la Comisión Mexicana de Ayuda al Refugiado (Comar) señala que entre 2019 y 2021 ha atendido 152.792 solicitudes de asilo.

Fierro García añadió que los migrantes intentan cruzar a Estados Unidos porque son víctimas de violencia y extorsión en su país de origen. «Venden lo poco que tienen, son engañados por los polleros y andan intentando llegar a Estados Unidos, para que les den asilo político», abundó. Afirmó que no sirve que en otros países las personas tengan un buen empleo «si el crimen organizado hace estragos en ellos y los hace abandonar sus raíces».

ARRIESGAN LA VIDA POR SU FAMILIA

Shutterstock

Martha Julissa es una guatemalteca de 20 años que busca llegar a Estados Unidos para sacar a adelante a su hija y, aunque quienes la trajeron a México le aseguraron que sería fácil pasar, se dio cuenta que no era así. «En el camino se sufre mucho, vengo con mi niña de 2 años, ella se enfermó y no sabía qué hacer. No logré pasar y por eso estoy aquí, para intentarlo», dijo.

No obstante, señaló que vale la pena arriesgarse, pese a que ahora tiene una deuda de 40.000 quetzales (5.172 dólares) que pidió prestados para el viaje, ya que en Guatemala «no hay futuro». Sonia Felipe Pascual también es guatemalteca y asegura que ya intentó cruzar a Estados Unidos pero la deportaron. «Yo arriesgué mi vida por mi hijo» aseveró.

Cruzar la frontera es un riesgo

El miedo al cruzar la frontera es enorme
Shutterstock

Precisó que en Guatemala no hay mucho trabajo, por eso tiene la esperanza de llegar a territorio estadounidense y forjar un mejor futuro con su hijo. Y aunque le da miedo cruzar consideró que si quiere salir adelante tiene que arriesgarse «sí vale la pena». Mauricio Gutiérrez es originario del sur de México y aunque le advirtieron sobre la dificultad de cruzar la frontera afirmó que «no perdemos la esperanza, necesitamos tener paciencia».

Dijo que vale la pena arriesgarse para cumplir su sueño y darle una mejor vida a sus hijos. «Los gobiernos piden a los migrantes que no vengan, si se pusieran en nuestros zapatos esto sería diferente, tenemos que arriesgarnos porque en nuestros lugares de origen no podemos volver por la violencia que cada día pasamos», lamentó. EFE News

Más de 3.900 niños migrantes separados de sus familias por el Gobierno Trump

Shutterstock

Washington, 8 jun (EFE News).- Más de 3.900 niños migrantes fueron separados de sus familias entre julio de 2017 y enero de 2021 por la política migratoria del entonces presidente, Donald Trump, informó este martes el Grupo de Trabajo de Reunificación Familiar establecido por su sucesor, Joe Biden. «El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) está comprometido con la tarea de reunir a las familias separadas cruelmente por el gobierno anterior», señaló en un comunicado el titular de dicho departamento, Alejandro Mayorkas.

El informe indicó que en ese período hubo 5.636 separaciones de familias y sus niños, pero que sólo 3.913 pueden clasificarse dentro de las definiciones de ese grupo de trabajo creado por la Administración Biden. Casi 400 menores de edad han sido enviados de retorno a sus países de origen, y otros 1.723 casos están bajo revisión, según indicó el DHS.

Reuniones familiares

Muchos se arriesgan en la frontera
Shutterstock

«Cuando reunificamos a las primeras siete familias el mes pasado, dije que eso era sólo el comienzo», añadió Mayorkas. «En las próximas semanas, reunificaremos otras 29 familias. En colaboración estrecha con organizaciones no gubernamentales, grupos legales y otras agencias, el Grupo de Trabajo continuará esta labor». El comunicado indicó que continuarán las reunificaciones y ya casi 50 trámites se han iniciado con el Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS), el cual ya ha revisado y aprobado 37 casos para el otorgamiento de una visa temporal por razones humanitarias.

Esto significa que los padres o madres de los menores que fueron separados podrán ingresar a Estados Unidos y se les permitirá que permanezcan por un período inicial de 36 meses con la oportunidad de solicitar autorización para trabajar. La directora ejecutiva del Grupo de Trabajo, Michelle Brané, dijo que el Gobierno proveerá a estas familias «el apoyo y los servicios para que reconstituyan sus vidas».

Desde que Trump no está, más indocumentados han llegado al país desde la frontera

Shutterstock

En los últimos 30 días, indicó el comunicado, 7 menores de edad se reunieron con sus padres o madres, llevando el total de niños que se han reencontrado con sus familias a 1.786. Hay otros 2.127 niños acerca de los cuales el Grupo de Trabajo «no tiene un registro corroborado de reunificación», añadió el comunicado. Estas cifras se conocen cuando la vicepresidenta, Kamala Harris, se encuentra de gira por Guatemala y México, a donde viajó para analizar la emigración a Estados Unidos, donde desde hace un año no dejan de aumentar la llegada de migrantes indocumentados y solicitantes de asilo, especialmente desde la llegada de Biden al poder.

Esta situación, con más de 178.000 inmigrantes llegando a la frontera con México en abril pasado, ha puesto en aprietos al Gobierno Biden, que se ha visto desbordado para atender a miles de menores no acompañados de alguno de sus padres o tutor legal y familias con niños pequeños, en una política migratoria que intenta distanciarse de la de Trump. EFE News

Artículo relacionado
Regresar al Inicio