El agua potable, otra víctima del huracán María en Puerto Rico The Associated Press Posted 1 year ago CAGUAS, Puerto Rico (AP) — Aguas residuales están desembocando en ríos y embalses de Puerto Rico tras el paso del huracán María, que inutilizó numerosas plantas de tratamiento de aguas sucias. La gente sin agua corriente se baña y lava su ropa en riachuelos contaminados y algunos isleños han tomado agua de pozos clausurados. Agua de un alcantarillado desbordado de Dorado, Puerto Rico, fotografiado el 12 de octubre del 2017. (AP) Casi un mes después del paso del huracán, Puerto Rico apenas empieza a comprender la magnitud de la emergencia en torno al medio ambiente, para la cual no hay soluciones claras a la vista. “Creo que este es el desafío más grande que ha encarado nuestro país en relación con el medio ambiente”, expresó Judith Enck, quien fue administrador de la Agencia de Protección Ambiental (conocida por sus siglas en inglés, EPA) de Estados Unidos en una región que incluyó a Puerto Rico bajo el gobierno de Barack Obama. Cientos de miles de personas todavía no tienen agua corriente y 20 de las 51 plantas de tratamiento de aguas negras no funcionan, lo que genera inquietud por la posibilidad de contaminación y enfermedades. Personas haciendo cola en sus autos para comprar agua potable en Dorado, Puerto Rico, el sábado 14 de octubre del 2017. (AP) “La gente en Estados Unidos no puede comprender la magnitud de lo que hace falta”, expresó Drew Koslow, ecólogo de la organización sin fines de lucro Ridge to Reefs, que hace poco pasó una semana en Puerto Rico trabajando en un sistema de tratamiento de aguas portátil. Funcionarios de la EPA dijeron que hasta la semana pasada no habían podido inspeccionar cinco de los 18 sitios abarcados por un programa llamado Superfund, que incluye sitios tóxicos altamente contaminados a ser limpiados por los riesgos que plantean a la salud y el medio ambiente, incluido un antiguo sitio de prácticas de bombardeos en la isla de Vieques. Más sobre la respuesta: https://mundohispanico.com/noticias/senador-democrata-de-ee-uu-critica-respuesta-tardia-a-puerto-rico “Quisiera tener más recursos para hacerle frente a todo esto”, dijo Catherine McCaby, subdirectora regional de la EPA. Menos del 20% de la red eléctrica de la isla está funcionando y, si bien se trajeron cientos de enormes generadores, hay numerosas plantas de tratamiento de aguas residuales que siguen sin funcionar y que pueden contaminar fuentes de agua potable. Una de las plantas de tratamiento más grandes de Puerto Rico alimenta un río que desemboca en el lago Carraizo, un embalse que suministra agua potable a la mitad de la zona metropolitana de San Juan. Varias de las estaciones de bombeo de la isla siguen fuera de servicio debido a la escasez de diésel para los generadores, lo que implica que las aguas negras van a parar al lago. Te puede interesar: https://mundohispanico.com/noticias/lourdes-ramos-puerto-rico-reclama-de-sus-mejores-hijos-para-reconstruccion La agencia instaló nuevas vallas durante el fin de semana y dijo que había tomado muestras de esos pozos, aunque los resultados de los análisis todavía no están disponibles. Se exhorta a los isleños a que no beban agua o toquen aguas de lagos y ríos, sobre todo después de un brote de lo que se sospecha es leptospirosis, una bacteria propagada por la orina de los animales. La EPA dijo que planea asignar más personal esta semana a inspeccionar unas 250 fuentes de agua que sirven comunidades remotas y que generalmente están en malas condiciones. En Guayama, ciudad de la costa sur, mientras tanto, los residentes han estado protestando porque se tiró una montaña de cenizas de carbón en los terrenos de una planta eléctrica. La pila parece intacta tras el paso del huracán, pero muchos temen que los vientos e inundaciones hayan esparcido cenizas mezcladas con metales en los barrios vecinos.