Mujer es arrestada por maltratar a sus hijos porque no llevaban mascarilla
- Una mujer fue arrestada después de maltratar públicamente a sus hijos porque no llevaban mascarilla y recientemente habían dado positivo por Covid-19
- Los funcionarios fueron en búsqueda de la mujer de 32 años, residente de Wickenburg, pero ella corrió por la casa y peleó cuando trataron de arrestarla
- Boone ahora enfrenta cargos por abuso infantil, alteración del orden público, agresión y resistencia al arresto
Una mujer fue arrestada después de
maltratar públicamente a sus hijos porque no llevaban mascarilla y recientemente habían dado positivo por Covid-19.
Se trata de Sarah Michelle Boone, una madre de Arizona, que reprendió a sus tres hijos: a uno los abofeteó en la cara, al otro lo pateó y al tercero lo tomó por el cuello. Todo esto porque se negaron a usar mascarilla a pesar de que estaban contagiados con coronavirus, informó WCTV.
Mujer es arrestada por maltratar a sus hijos porque no llevaban mascarilla
El hecho ocurrió el pasado sábado en plena vía pública, por lo que testigos de la agresión se comunicaron con la policía.
Los funcionarios fueron en búsqueda de la mujer de 32 años, residente de Wickenburg, pero ella corrió por la casa y peleó cuando trataron de arrestarla.
La situación requirió que la policía utilizara una pistola eléctrica para poder detenerla. Agregaron que Boone pudo haber estado bajo influencia de drogas y alcohol, reseñó AZ Family.
Boone ahora enfrenta cargos por abuso infantil, alteración del orden público, agresión y resistencia al arresto. Además, se encuentra detenida con una fianza de $ 5,000 dólares.
Se desconoce por qué los menores estaban en la calle si estaban contagiados. Se desconoce si luego del arresto de su madre fueron entregados a un familiar o Servicios para Menores.
Crónica: Hispano se roba carro con un bebé a bordo
El peor temor de un verdadero padre o madre de familia es que a alguno de sus pequeños le pase algo malo, así es que me imagino el tremendo susto que acaba de pasar un hombre cuando le robaron su carro con todo y su bebé a bordo.
El señor se bajó a una tienda de llantas para hacer una simple consulta de precios. Como estaba demasiado frío prefirió no bajar a su niña de siete meses, que en ese instante estaba dormidita.
Optó por dejarla en el interior del vehículo con la calefacción prendida, pero para su mala suerte, ‘la ocasión hace al ladrón’, como dice el viejo adagio y pues un delincuente que casualmente estaba cerca se dio cuenta de que estaba un auto con las llaves puestas.
Sin pensarlo dos veces, su instinto de atracador lo llevó a montarse a la unidad y robársela sin saber que había un infante adentro.
El dueño del carro se dio cuenta de que un desconocido estaba por llevarse su más preciado tesoro y sin dudarlo un solo instante, hizo cuanto pudo por evitarlo.
El padre confrontó al sujeto y trató de bajarlo, pero este puso el vehículo en reversa y abandonó el estacionamiento a toda prisa.
En su huida, iba manejando tan imprudentemente que golpeó a otro vehículo que transitaba por la zona y hasta se llevó un rótulo.
Los testigos llamaron de inmediato al 911 y cuando las autoridades del condado de Gwinnett, en Georgia, supieron que había un niño en peligro desplazaron a todas sus unidades disponibles.
Afortunadamente, un oficial fuera de servicio que estaba por el área escuchó la llamada de emergencia y se movilizó en el acto, encontrando el vehículo abandonado menos de una milla del lugar del robo.
La pequeña de siete meses se encontraba ahí sentadita en su asiento de seguridad, y aunque lloraba mucho, estaba ilesa.
Tras ponerla a salvo por completo, le informó a sus colegas, que entonces se concentraron en buscar al bandido.
Gracias a los perros de la unidad canina, lograron encontrar a un sospechoso, que luego identificaron como Joshua Rodríguez, de 27 años.
Lo acusaron formalmente de los delitos cuando el padre de la menor lo identificó, así como las cámaras de vigilancia del establecimiento donde ocurrió todo.
Crónica: Hispano se roba carro con un bebé a bordo
Dicen que el que mal anda, mal acaba y este sin duda alguna será el caso de Rodríguez, quien enfrenta cargos por asalto agravado, crueldad infantil, secuestro, robo de un vehículo y provocar un accidente y darse a la fuga (‘hit and run’), entre otros.
Aunque legalmente es inocente de las acusaciones que ahora se le imputan, este muchacho no es ninguna blanca paloma.
En la última década ha sido arrestado en Georgia una veintena de veces, casi siempre por delitos graves.
La primera vez que cayó preso tenía apenas 17 años. Lo acusaron de robo e invasión en propiedad privada. Todo indica que de ahí en adelante adoptó ese estilo de vida.
Tiene la suerte de que nació en Atlanta, de lo contrario, ya hace ratos lo habrían deportado.
Por tantos delitos que ha cometido básicamente ha pasado la mitad de su vida en prisión, pero ahora le espera una larga condena, porque haber puesto en peligro a un bebé es algo que los jueces acá no perdonan.
Ojalá que su historia le sirva de ejemplo a las demás personas que, como él, creen que pueden hacer lo que les viene en gana.
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