Colibrí divulga las costumbres y tradiciones de Oaxaca a través de sus bailes folclóricos
Es un gran honor para los integrantes del nuevo grupo de danza folclórica Colibrí (antes Euzkal) mantener vivas las costumbres y tradiciones de Oaxaca y divulgar el vasto y colorido repertorio de sus bailes tradicionales en Georgia.
Colibrí, que se formó hace dos meses tras la desintegración del grupo folclórico Euzkal, presentó un par de danzas representativas del famoso festival oaxaqueño La Guelaguetza durante su presentación en el Festival de Día de Muertos celebrado el 28 de octubre en el Atlanta History Center.
“En el Festival de Día de Muertos vamos a presentamos dos bailes de La Guelaguetza. Una se llama ‘Pinotepa Nacional’, que es un baile de la costa de Oaxaca y el otro se llama ‘Flor de Piña’, un baile de la región de Tuxtepec”, explicó Silvia Manfredi, una de las integrantes de Colibrí y su vocera.
La base de Colibrí son los bailes típicos de La Guelaguetza, la fiesta más grande de los pueblos oaxaqueños que se celebra anualmente en julio. La festividad se remonta a la época colonial y se relaciona con la fiesta católica del Corpus Christi y las ceremonias de los indígenas zapotecas, mixtecas y de otras etnias para agradecer con ofrendas a sus dioses por las bendiciones recibidas.
Durante la celebración las ocho regiones tradicionales (Los Valles Centrales, La Sierra Juárez, La Cañada, Papaloapan, La Mixteca, La Costa, La Sierra Sur y el Istmo de Tehuantepec) presentan una muestra de su patrimonio cultural a través de bailes, música, cantos y trajes de gala de sus pueblos.
“Desde niño me enseñaron a querer las costumbres de Oaxaca. Pertenecer a Colibrí significa mantener vivas las costumbres y tradiciones de mi familia para así mismo darle las mismas enseñanzas a mi futura familia”, Ulises Eduardo Ramírez, estudiante y bailarín de Colibrí.
Colibrí lo conforman Yen Carolina Gaona Barrita, de Oaxaca; Román Jiménez, de Hidalgo; Arcelia López, de Michoacán; Ivón Fabela, de Ciudad de México; Silvia Manfredi, de Tabasco; y los jóvenes estadounidenses de padres oaxaqueños Ulises Eduardo Ramírez, Daisy Ramírez, Alejandra Ramírez y Daisy Ortiz Rueda.
Orgullo de formar parte de Colibrí
Tanto para los bailarines adultos de Colibrí como para los más jóvenes, la satisfacción de mostrar las costumbres y tradiciones de ese estado es la misma.
“Es un honor bailar las danzas tradicionales de Oaxaca, una de las regiones más multiculturales de México. Nos alegra mucho representar su folclor, que no es muy conocido, pues la mayoría de los ballets interpretan lo que es el baile nacional (Veracruz, Jalisco, Tamaulipas, y todo eso)”, dijo Manfredi, trabajadora social y que trabaja como paralegal.
Para la michoacana Arcelia López ser parte del grupo de danza le ha ayudado a conectarse con las raíces culturales de su país.
“Colibrí me ayuda a activarme como mexicana y me conecta a lo que soy. Me gusta representar a México con sus danzas y a través de estas decirle al mundo lo lindo que es mi país”, expresó López.
A Ivón Fabela, nativa de Ciudad de México, el orgullo le sale por los poros al decir que desde chica tuvo interés, pasión y amor por la danza folclórica.
“Me siento muy orgullosa de la cultura y tradición de México, su arte y bellas costumbres; los alegres colores y bailes que representan son inigualables. Pertenecer al grupo Colibrí es un placer y una dicha transmitir hermosas tradiciones y despertar en la gente la alegría que nos caracteriza”, manifestó Fabela. “Lo colorido del vestuario que portamos, nuestra entrega en el baile, la armonía del grupo, entre otras cosas son lo que hacen que Colibrí sea un grupo digno de representar nuestra cultura”, sumó.
Por su parte, el hidalguense Román Jiménez está muy agradecido con Colibrí por permitirle, no solo representar con orgullo la cultura de México y mostrársela al mundo, sino también para poder transmitírsela a sus hijos.
Esa pasión de los bailarines adultos de Colibrí ha dado frutos en sus familias. Recientemente se sumaron al grupo de danzas folklóricas tres primas nacidas en Estados Unidos y de padres oaxaqueños: Daisy Ramírez (18), Alejandra Ramírez (18) y Daisy Ortiz Rueda (16).
“Desde pequeña crecí amando la cultura oaxaqueña, mi madre bailaba los bailes regionales y por eso me encantan las tradiciones de mis padres. Estar en Colibrí es una manera de mantener esa cultura viva, me hace sentir especial y diferente”, manifestó Ortiz Rueda.
Para concluir, Manfredi indicó que su presentación en el Festival de Día de Muertos será la última del año y que para 2019 agregarán a su repertorio algunas danzas de Hidalgo, Jalisco y Veracruz. Además, invita a los interesados a tomar clases de danzas típicas y bailar en el grupo, especialmente a varones de cualquier edad. Pueden llamar al 404.454.2267 y 678.333.2854. También pueden contactarles en su cuenta en Facebook: www.facebook.com/Colibr%C3%AD-grupo-de-danza-folcl%C3%B3rica-mexicana-186288766380731