En partido no apto para cardíacos, Portland vence a Seattle
Emoción total El partido Portland Timbers y Seattle Sounders no fue un Clásico a lo River-Boca que éste sábado paralizará a un país entero, pero si fue un Clasico jugado a todo tren. Un partido de locura. Un partido de varios goles. Un partido que terminó en penales. Y desde los 12 pasos, cualquier cosa podría pasar.
Y pasó lo que tenía que pasar. De esta nadie se salvaba. Después de los penales tendría que salir un ganador. Si o si. Y así fue. Al final la noche fue para el equipo de Oregón. Noche de locura. E inolvidable por todo lo que pasó en el Clásico de Cascadia por las semifinales de la Conferencia Oeste.
El marcador global quedó 4-4. Desde el manchón penal y en casa de su archirrival, el club de Oregón fue más efectivo que Seattle Sounders. Finalmente fue 4-2 dejando al equipo Esmeralda, eliminados.
Emoción total. 120 minutos de juego. Dramatismo por todo lado. Gol de Raúl Ruidíaz, partidazo de Nicolás Lodeiro. Goles de Sebastián Blanco y las buenas atajadas de ambos arqueros quedará por mucho tiempo en la retina de los hinchas. Partidos de tanto nerviosismo, así nomás no se ven todas las semanas.
Diez minutos después, aparece Sebastián Blanco para empatar el marcador y darles la ventaja en el global a los visitantes. Fue un golazo desde fuera del área. Uno a uno y esto tenía para más.
Con la victoria, Portland jugará la final de la Conferencia Oeste. Seattle se despidió. Murió de pie. Este año no podrá jugar su tercera final de MLS Cup. Así es el fútbol. Da para todo. Y esta vez le tocó a los de Oregón pasar a una etapa importante de la MLS.