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La niña Dulce María no pudo celebrar, por primera vez, las fiestas con su familia

Por primera vez la niña Dulce María Alavez no pudo celebrar las fiestas junto a su familia, tras su desaparición en septiembre pasado.
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  • Por primera vez en sus cinco años, la niña Dulce María Alavez no pudo celebrar las fiestas junto a su familia.
  • Desde el pasado 16 de septiembre desapareció a plena luz del día en un parque de la ciudad de Bridgeton, en New Jersey.
  • La familia de la niña mexicana continúa pidiendo apoyo de la comunidad para encontrar a la menor.

Es época de fiestas, de encuentros familiares, de gozo y alegría; sin embargo, una familia hispana del estado de New Jersey no tiene motivos para celebrar, sino para incrementar su lamento, en el que están sumergidos desde el pasado 16 de septiembre cuando su niña, Dulce María Alavez, desapareció en plena luz del día.

Desde entonces han sido en vano todos los esfuerzos de parte de agencias locales, estatales y federales, además de familiares y amigos. La menor, de apenas cinco años, no aparece, como tampoco ningún rastro, por diminuto que sea, que de con su paradero o que muestre señales de vida.

En estos casi tres meses, decenas de personas se han sumado a la búsqueda de la niña mexicana, desaparecida en un parque de la ciudad de Bridgeton, New Jersey, donde las autoridades ofrecen una recompensa de 52 mil dólares por cualquier información que pueda ser útil y han investigado la zona desde que tuvo lugar la desaparición.

De acuerdo al relato de la familia, Dulce María estaba jugando en el parque con su hermano de 3 años, Manuel, mientras la madre, Noema Alavez Pérez, de 19 años, permanecía en el auto junto a una familiar de 8 años.

La madre estaba revisando la lotería y preparándose para ayudar a su familiar con las tareas escolares cuando ésta le dijo que no podía ver a los niños en el parque, tras lo que encontró a Manuel llorando y llamó a las autoridades para denunciar la desaparición.

La alerta ámbar, que notifica sobre niños secuestrados, se emitió el 17 de septiembre, al día siguiente de reportarse la desaparición, después de que un testigo –otro niño, según ha trascendido- asegurara que vio a un hombre llevarse a la niña hasta una furgoneta.

Días más tarde, con la ayuda de otro testigo, las autoridades divulgaron el boceto de un hombre que se cree es hispano y al que se considera un testigo potencial pero no un sospechoso.

El FBI, que muestra una fotografía de Dulce María en la lista de personas secuestradas o desaparecidas en Estados Unidos, ha estado en contacto con el padre de la niña, que vive en México.

Días después de la desaparición, las autoridades de Inmigración detuvieron al actual novio de la madre de la niña y, aunque fue puesto en libertad, una portavoz de la familia, Jackie Rodriguez, sugirió que el incidente ha sido disuasorio para quien pudiera ayudarles: “Creo que vieron eso y pensaron, no voy a decir nada”.

Un portavoz de Inmigración dijo que no persigue a los testigos y animó a cualquier persona “independientemente de su estatus (migratorio) a cooperar con las autoridades locales, estatales y federales sin miedo a represalias”.

Entretanto la familia de Dulce María pide a la comunidad apoyo en su continuo esfuerzo por encontrar la niña. “Todavía tenemos la esperanza de que la encontraremos”, afirmó recientemente la abuela Norma Pérez Álvarez en una conferencia de prensa con medios locales.

Tras la desaparición de la menor, la policía ha realizado una intensa búsqueda, a la que se unieron agentes federales, que se extendió a comunidades vecinas, sin resultado. La familia, que está cooperando con las autoridades, manifestó su frustración con la falta de novedades en este caso.

“No culpan a la policía porque saben que están investigando las 24 horas los siete días de la semana. Están haciendo su trabajo. Simplemente están molestos porque no hay respuestas para ellos”, dijo la portavoz de la familia, Jackie Rodríguez.

La familia ha distribuido puerta a puerta el boceto de Dulce María y ha buscado en otras áreas locales, lejos del parque de donde desapareció, incluyendo fincas alrededor de la ciudad de Bridgeton. Las pesquisas han incluido lugares en los que no se ha buscado a la niña previamente. (Con información de EFE)

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