Crónica: Murió cuando debía celebrar el cumpleaños de sus gemelas

• Crónica: Hispano murió de coronavirus el día de cumpleaños de sus gemelas.
• “El sistema de salud nos falló», dijo su esposa.
• Rolando «Sonny» Aravena murió a los 44 años, después de pedir ayuda por 13 días.

Sonny sintió escalofríos. No dijo nada,

al principio, para no asustar a Melody, su esposa. Los niños jugaban por la casa. Escuchaba el alboroto feliz.

Se escondió en el baño para tomarse la tempertaura. Tenía fiebre. Quizá fuera algo pasajero y leve, pero con la pandemia de coronavirus segando vidas, no podía arriesgarse.

Se abrigó. Le dolían todos los músculos.

«Mami… no me siento bien».

Melody lo miró. Después de que lo mandaron a trabajar a ese hospital de Manhattan, ella estaba en guardia todo el tiempo. Le había pedido que no fuera, pero como técnico de Verizon, no tenía opción.

«Llama a la línea de ayuda, amor», le respondió. «Tenemos que saber cuanto antes si tienes COVID-19».

Rolando Aravena se encerró en el dormitorio para estar a solas y aislarse de los 5 hijos que, ajenos a todo, seguían con sus vidas.

Esperó 5 horas en línea hasta que alguien pudo atenderlo. Para ese momento, se sentía aún peor y ya estaba muy asustado.

«Servicio de ayuda, ¿en qué podemos servirle?», dijo por fin una voz del otro lado del teléfono.

«Tengo síntomas de coronavirus, no me encuentro bien, mi familia está en casa, ayúdeme, por favor», gimió Sonny.

«Está bien, señor, mántengase en su casa, le haremos una prueba el 26 de marzo».

Sonny suspiró, era 19 de marzo. Aún faltaban muchos días.

Los días posteriores, Aravena fue empeorando. Tanto, que fue a clínicas de atención urgente y a una sala de emergencias, pero le dieron un inhalador y le dijeron que se pusiera en cuarentena en casa.

Melody estaba cada vez más asustada. Nunca aceptaban a Sonny y lo devolvían a casa. «Los médicos lo rechazaron enviaron tres veces … incluso con un nivel de oxígeno de 89», escribió en Instagram.

Sonny se aferraba a controlar su respiración, cada vez más dificultosa, boqueando en un inhalador que le habían dado. Eso era todo. No más ayuda.

El 29 de marzo, Melody se dio cuenta de que su esposo tenía problemas para respirar y lo llevó a la sala de emergencias del Centro Médico Regional de Orange.

Pero ya no pudieron regresar a casa para celebrar el cumpleaños de las gemelas Ameera y Olivia, que cumplían 10 años.

Después de 13 días de batalla solitaria contra el COVID-19, Sonny murió al poco de ser aceptado en el hospital.

Murió cuando debía celebrar con sus gemelas, por Mario Guevara

Melody publicó al día siguiente el post más triste en Facebook. Sonny se había ido para siempre en el momento en que más felices debían estar. El mundo se había roto para esta familia.

«Anoche perdí la mejor parte de mí. Mi corazón ha sido arrancado de mi cuerpo. Está destrozado en un millón de pedazos. Cómo me gustaría poder decirles a todos que no es verdad. Mis hijos nunca volverán a ver a su padre en ninguna de sus celebraciones más importantes, nunca más».

El 1 de abril, después de haber salido un poco del estado de shock en que la muerte de Sonny dejó a esta familia. Ella compartió otro post en Facebook. Esta vez era una denuncia.

«El gobierno le falló a mi familia y a mi marido. El sistema de atención médica también nos falló. Ellos, junto con COVID-19, están destruyendo familias. Mi alma gemela se ha ido. El dolor es insoportable. No sé cómo o incluso si podemos sobrevivir a esto. Ojalá pudiera estar enfadada con él. Cualquier cosa que me hiciera lidiar más fácilemente con el dolor. Pero no puedo. Porque no era un hombre egoísta. Era un desinteresado.

Sonny esperó una semana para hacerse las pruebas [de COVID-19]. Estaba enfermo ya el jueves 19 de marzo. Llamó al número de línea directa. Tenía una cita para el 26 de marzo para la prueba. Fue a Cuidados Urgentes el 22 de marzo. Fue a urgencias el 24 de marzo, pero fue rechazado. Fue a atención urgente porque su nivel de oxígeno era de 89 el día 26. Le dijeron que usara el inhalador y permaneciera en cuarentena.

Murió cuando debía celebrar con sus gemelas, por Mario Guevara

Ayer, 31 de marzo, 2 días después de su muerte obtuvimos sus resultados. Positivo a COVID-19. Los médicos nos rechazaron 3 veces. Incluso con un nivel de oxígeno de 89. Vete a casa. Haz cuarentena. Haz nebulizaciones. Todas las señales de que el virus lo estaba matando estaban ahí. Y nos rechazaron. Y mi esposo, mi amado esposo, seguía diciendo que son médicos, que saben de lo que están hablando. No me lleves de vuelta allí. Si estuviera en peligro eminente, me aceptarían.

Quiero que todos lo sepan. Que murió el 29 de marzo de 2020 el día en que deberíamos haber estado celebrando el cumpleaños número 10 de nuestras hijas gemelas. Sus últimas palabras para mí fueron: Mel, nunca conocí el amor así antes. Te quiero mucho.

El sistema contribuyó a la muerte de mi marido. Le fallaron, le fallaron a mi familia.

Su empleador, Verizon, lo envía a él y a otros empleados a trabajar en hospitales y otros lugares sin el entrenamiento adecuado o equipo de protección.

Todos contribuyeron a la muerte de mi marido.

Yo me hice el test el 28 de marzo y aún no tengo mis resultados. Cuando llamé ayer me dijeron que mi prueba estaba pendiente. Cuando pregunté qué significaba eso, dijeron que no había sido procesado. Nos han fallado.

Esta es la realidad».

Murió cuando debía celebrar con sus gemelas, por Mario Guevara

Hasta publicó mensajes privados con su esposo con respecto a la orden de ir a trabajar al hospital sin entrenamiento.

Hermano, yo no tengo palabras que escribir después de la verdad desnuda que ya escribió Melody. Este hispano amado y respetado se fue confiando en el sistema. Y no nos queda otra que hacer eso… pero para esta familia ya no es una opción.

Entiendo que estamos superados, que nadie quiere que otro muera, pero el sistema parece estar haciendo agua por todos lados.

Solo queda cuidarse, preparase para lo peor, como dice Trump, y esperar lo mejor. Juntos.

Gracias por leer mi crónica de hoy, te espero en la de mañana, como siempre.