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Crónica: Fueron por tortillas y la tragedia se ensañó con esta familia

Crónica: Fueron por tortillas y la tragedia los destruyó. Iba a ser un lindo domingo de padres e hijos, pero todo terminó en horror.
2020-07-07T12:31:19+00:00
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  • Crónica: Fueron por tortillas y la tragedia se ensañó con esta familia.
  • Una familia fue a buscar su almuerzo en un restaurante y en pocos minutos su vida quedó destrozada.
  • Los Cortés no tienen consuelo por algo que comenzó como una hermosa salida en familia.

La familia Cortés decidió comer algo diferente y

rico sin que mamá tuviera que cocinar, así que, todos, los padres y sus cuatro hijos, se fueron a buscar delivery de tortillas en un restaurant.

Eran las 2 p.m. del domingo en Pico Rivera, la zona de restaurantes de Los Angeles.

Todos estaban contentos, pero eran muchos, así que mamá y papá decidieron bajarse a buscar el pedido en la tortillería La Mano, mientras los 4 hijos quedaban en la van familiar.

«No vayan a hacer bochinche», dijo mamá con una sonrisa. Los cuatro respondieron con muecas divertidas, el domingo era un día encantador.

«¡¡No se olviden de traer postre!!», se reían.

Eran cinco minutos nada más, las llaves del auto estaban puestas para el aire acondicionado los mantuviera fresquitos a todos, los niños estaban juntos. Nada iba a pasar. Estaban más seguros en el auto que afuera.

Papá guiño un ojo, «Pórtense bien», dijo.

Y entraron en el restaurante para buscar el almuerzo.

Los niños se prendieron a sus celulares, bromearon, se pelearon, en fin, todas esas cosas que sabemos que hacen los niños cuando los padres no están.

Pero no estaban tan solos como creían.

Alguien estaba vigilando cada uno de sus movimientos.

José Aguilar, de 26 años, estaba observando.

Y, de la nada, cuando los padres dejaron solos a los niños, saltó al asiento del conductor y se robó el auto aunque los hijos de los Cortés estaban dentro.

«¡Salgan de aquí! ¡Salgan del madito auto!», les gritó mientras ya lo ponía en movimiento.

Dos de los hijos, una muchacha de 18 años y un varón de 11, pelearon con Aguilar antes de que este acelerara, pero no pudieron impedirlo.

«¡¡Vámonos!!», gritó Aguilar, y aceleró el vehículo de manera vertiginosa. Los dos «hermanos peleadores» salieron disparados del auto enseguida, puesto que las puertas de la van se abrieron por el acelerón, sufrieron heridas menores.

Pero en el vehículo quedaron atrapados con Aguilar dos hermanitos más. Isabella de 13 años y el más pequeño de todos, de 8 años.

Isabella vio horrorizada cómo Aguilar expulsaba a su hermanito del auto a una veocidad de 60 millas por hora.

Después fue su turno. No se sabe todavía si a ella también la empujó o ella misma quiso escapar aterrada como estaba y saltó.

Fueron por tortillas y la tragedia los destruyó, por Mario Guevara
La van familiar a la izquierda, Isabella Cortés a la derecha – Fotos: Captura de video ABC News

Pero también cayó del auto en marcha. Solo que Isabella no tuvo la misma suerte que sus hermanos y murió en el acto.

Aguilar siguió su loca carrera a gran velocidad por Whittier Boulevard hasta que su falta de todo lo llevó a chocar con otro auto en la intersección de Whittier y Rosemead Boulevards.

Allí no se acabó su aventura de robacoches. El auto se detuvo debido a una avería masiva y Aguilar huyó corriendo.

Fueron por tortillas y la tragedia los destruyó, por Mario Guevara

Nadie salió herido en ese choque, pero la tragedia ya había explotado para los Cortés.

Sin embargo, Aguilar iba por más. Intentó robar otro auto de la misma forma.

Un hombre salió de su vehículo para comprar fruta. Su esposa y su hijo quedaron esperando dentro del coche. ¡Y repitió lo que había hecho con los Cortés!

Pero esta vez, el padre de familia se dio cuenta a tiempo y pudo forcejear con Aguilar, ya con el auto andando, y hacerse con el control del volante.

Terminó, de nuevo, en choque. Pero los ocupantes no sufrieron daños.

Desesperado porque veía que le «caía la noche», Aguilar intentó huir de nuevo, pero los vendedores de fruta que habían visto todo, lo detuvieron y llamaron a la policía.

Los investigadores dijeron que Aguilar sufrió varias lesiones y fue llevado a un hospital local para recibir tratamiento.

Después, fue arrestado por cargos de asesinato, robo de autos y secuestro. Además, LASD informó que Aguilar estaba en libertad condicional en el momento de su arresto. Anteriormente había sido detenido por posesión grave de una daga y vandalismo y fue puesto en libertad bajo fianza.

Fueron por tortillas y la tragedia los destruyó, por Mario Guevara

Isabella Cortés está muerta. Su hermanito está gravemente herido. Todo por un delincuente que ya tenía antecedentes y al que le importó nada si dañaba a alguien.

A Aguilar la cárcel no le sirvió de nada. A los Cortés, su libertad condicional les supuso una tragedia de la que nunca se recuperarán.

¿Cuál es el valor de la vida de una niña de 13 años? No tiene precio para las personas de bien, pero a este delincuente le valió madre, como se dice por ahí.

Para mí, un tipo como este es lo que no vale nada. No sé si empujó a Isabella fuera del auto en marcha o ella se tiró, no me importa. Era una niña que no merecía algo tan horrendo como este fin.

¡Dios mío! Los Cortés eran una familia como la tuya, como la mía. Iban a buscar el almuerzo del domingo.

Tanto dolor merece un castigo, no puede pasar que, sin buscarlo, sin merecerlo, la gente tenga que sufrir esto.

No tengo nada más que decir porque no hay más que decir excepto el gran dolor que la comunidad siente, la rabia y la impotencia a la que me uno.

Gracias por leer mi crónica de hoy para Mundo Hispánico, te espero en la de mañana, como siempre.

*Nota del editor: esta crónica está basada en un caso real y cuenta con elementos ficticios propios de este género.

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