California Incendio provoca la evacuación de miles de residentes

Han evacuado a más de seis mil residentes de la zona
Más de dos mil 400 estructuras estaban dañadas
Fuego se extendió por las montañas del Bosque Nacional Los Padres

California incendios. Un incendio que arrasaba el martes las montañas del sur de California al norte de Santa Bárbara forzó el desalojo de hasta 6,300 personas de sus viviendas, pero una tormenta se avecinaba con la esperanza de que las llamas se extinguieran, informaron las autoridades.

Mike Eliason, vocero del Departamento de Bomberos del condado de Santa Barbara, indicó que 2,400 estructuras estaban en riesgo por el incendio, reportó la televisora KEYT.

El incendio empezó alrededor de la 4 de la tarde del lunes en el Bosque Nacional Los Padres cuando había ráfagas de viento de hasta 48 km/h (30 mph).

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Fue a través de los portales de algunos medios informativos que se dieron detalles preliminares del incendio, que ya ha afectado a gran parte de esa población.

Para la mañana del martes, se calculaba que el incendio se extendía más de 16 kilómetros cuadrados (6 millas cuadradas) sin contención. No se habían perdido vidas ni casas, tuiteó Eliason.

El fuego principalmente arrasaba cañones secos y tupidos, y crestas de las montañas Santa Ynez, pero se ordenó que la población en las laderas desalojara la zona del incendio.

California incendios.

En 1990 un incendio en la misma región destruyó más de 400 viviendas.

Durante su sesión informativa de la mañana, se le informó a los bomberos que habían pasado 180 días sin lluvia y que la vegetación estaba seca y vulnerable a chispas, como se demostró por el crecimiento exponencial del incendio.

A los bomberos les advirtieron que las vías en la zona irregular podían ser demasiado estrechas para sus vehículos, y que muchos residentes no se habían ido.

La llegada de un sistema de baja presión y la lluvia que conlleva también representaban peligros que iban desde vientos cambiantes hasta flujos de escombros de las profundas laderas, les indicaron a los bomberos.

Se esperaba que cayeran hasta 2,5 centímetros (1 pulgada) de lluvia en la zona y los equipos recibieron órdenes de no conducir vehículos en lugares anegados.

Los incendios e inundaciones traen recuerdos negativos en la región.

En enero de 2018, una precipitación en una ladera recién incendiada justo al este de Santa Bárbara provocó un enorme alud que devastó a la comunidad de Montecito, donde 23 personas murieron y casas quedaron destruidas.

El fuego, bautizado como incendio Cave, se extendió rápidamente por las montañas del Bosque Nacional Los Padres, y afectaba a cerca de 2.400 edificios en el condado de Santa Barbara, situado al noroeste de Los Ángeles.

La noticia del incendio pronto corrió por las redes sociales y se emitió una alerta debido a que se extendía rápidamente a varias partes de la zona afectada.

Varios medios de comunicación seguían por la noche publicando más detalles del incendio que encendió las alarmas de los cuerpos de rescate del condado.

Decenas de elementos del Cuerpo de bomberos acudieron al llamado de auxilio y colaboraron con diferentes equipos para combatir el incendio que se extendía rápidamente por la zona boscosa de Santa Bárbara.

Most of the thousands of people who fled a raging California wildfire in the mountains north of Santa Barbara were told they could return home as an approaching storm offered hope the flames would be doused. https://t.co/Ca3QGLxplx

— The Associated Press (@AP) November 26, 2019

California incendios. Por otro lado, ya más noche, se comunicó que el «incendio Cave estaba causando condiciones de peligro extremo para la seguridad de las personas y la propiedad en el condado de Santa Bárbara», de acuerdo al condado en un comunicado en el que anunció una declaración estado de emergencia.

A wildfire that has scorched about 4,100 acres is advancing toward populated areas around Santa Barbara and Goleta, California https://t.co/s4nQtt5rIE pic.twitter.com/th8WI4fwY0

— CNN Breaking News (@cnnbrk) November 26, 2019

California incendios. Fue hace una semana que la empresa de electricidad Pacific Gas & Electric Co. se dispuso a cortar la electricidad a unos 375,000 de sus clientes en 18 condados del norte y centro de California mientras la región enfrentaba desde octubre condiciones meteorológicas propicias al fuego.

En un otoño casi sin lluvias, la maleza estaba reseca y los pronósticos anunciaban escasa humedad con ráfagas de viento de hasta 88 km/h (55 mph), las cuales podrían arrojar ramas de árboles y otros escombros sobre los cables eléctricos y las consiguientes chispas podrían iniciar incendios catastróficos en la región, dijeron en ese entonces los directivos de PG&E.

Una estación meteorológica del condado de Napa informó en ese entonces que no se había registrado una gota de lluvia desde mediados de septiembre, dijo Scott Strenfel, meteorólogo jefe de PG&E.

El norte de la Sierra Nevada registó apenas unos milímetros de lluvia en los últimos dos meses, cuando lo habitual sería 127 milímetros (cinco pulgadas), acotó.

«Esta falta de lluvia significa que la amenaza del fuego es muy real, a esta altura de la temporada, en muchas zonas», dijo en ese momento Strenfel.

https://www.youtube.com/watch?v=I7OFirPE2MY

California incendios. Irónicamente, la sequía en el norte de California coincidía con un breve período de lluvias intensas en el sur del estado. Una tormenta arrojó 50.8 milímetros (dos pulgadas) de lluvia en el condado de San Diego el martes y se pronosticaban nuevas precipitaciones para esa semana.

En poblaciones al este de Los Ángeles regía una advertencia por inundaciones repentinas y en las montañas se pronosticaban tormentas, pero en el norte regían advertencias de peligro por incendios.

La agencia estatal de bomberos emplazó en ese entonces camiones y cuadrillas en algunos condados y tenía personal listo para manejar aviones y bulldozers.

Los cortes de electricidad afectarían a los distritos al norte de Sacramento, el área de la bahía de San Francisco, la zona vinícola y las estribaciones de la Sierra Nevada.

El clima tenía que mejorar para esa semana, lo que permitiría restaurar el servicio eléctrico, dijo Mark Quinlan, director de preparativos de emergencia de PG&E.