11 secretos para memorizar cosas más rápido que los demás

• ¿Te cuesta un poco de trabajo memorizar las cosas?
• Es posible aprender a memorizar más rápido ¡descubre cómo!
• 11 secretos que no querrás perderte para tener una memoria prodigiosa

La memoria es uno de los misterios más grandes de la ciencia; algunas personas son capaces de memorizar algo con tan solo ver una imagen, mientras que unos otros suelen recordar algunas cosas aunque ya haya pasado mucho tiempo. La complejidad radica en que cada ser humano es diferente, pero ciertamente hay momentos de la vida en los que es necesario que aprendamos algo con urgencia. Hablaremos de 11 secretos para memorizar cosas más rápido que los demás. Si tienes problemas para memorizar información, debes saber que existen técnicas para hacer este proceso más rápido y exitoso, ¡descubre cuáles son!

Haz una repetición espaciada de la información

Cuando necesitar memorizar una información de un día para otro, uno de los mejores secretos para memorizar es que te tomes el tiempo necesario para poder hacerlo de manera adecuad. Lo mejor es que hagas una serie de repeticiones; por ejemplo, una vez que has aprendido algo, deja reposar la información y ve repitiéndola (sin mirar tu material) cada 20 minutos, 8 horas y, finalmente, 24 horas después.

Memorización a largo plazo

Si requieres memorizar un material a mediano plazo, deberás seguir la misma técnica de repetición espaciada, pero esta vez deberás añadir una repetición una o dos semanas después, para finalmente verificar que lo has aprendido correctamente a los dos o tres meses. A veces debemos dejar «reposar» los datos para poder recordarlos mejor.

Intenta comprender lo que requieres aprender

Muchas veces nos enfocamos en repetir las cosas para memorizar éstas, pero será más sencillo aprender algo que comprendemos y entendemos, y es por eso que más que preocuparte por aprenderlo de memoria, primero debes tener una idea clara de qué se trata la información y, dependiendo de la situación, para qué puede servirte.

Primero lo primero

No necesitas aprenderte todo, pero sí lo más necesario. Haz una listas de prioridades y decide qué es lo que más te va a servir o, bien, que es lo más importante que debes incluir en tu sesión de estudio. Aunque es maravilloso saber un poco de todo, no necesitamos saber todo de todo; sé selectivo con lo que te gustaría saber, ya sea por gusto o por necesidad.

Mantén un orden

Todo se aprende mejor si hace desde el principio y se sigue un orden serial; no querrás saltarte información importante y cortar la hilación de las cosas, puesto que esto haría más complicado el proceso de comprenderlas, entenderlas y aprenderlas. Es importante saber de qué se habla y una vez hecho eso podrás discriminar la información.

Aprende cosas opuestas

Esta es una de las técnicas más utilizadas cuando se trata de enseñar una lengua extranjera; por ejemplo, cuando se aprenden las partes del día o los estados del ánimo (día-noche; feliz-triste; blanco-negro; etc.). Los antónimos son una magnífica forma de conocer y retener más palabras. Intenta buscar el significado opuesto de una palabra que ya conozcas.

Palabras clave

Busca palabras que se puedan conectar de manera lógica dentro de un mismo grupo, así crearás una asociación y te será más fácil ir conectando aquella información que pretendes aprender. Incluso puede no ser una palabra sino una frase; lo único que debes tomar en cuenta es que sea algo que te ayude a establecer una buena conexión.

Inventa historias

Agrupa todas las palabras clave y comienza a utilizarlas dentro de un contexto que te resulte familiar; si vas armando una historia con lo que ya aprendiste, te será más fácil recordarlo cuando lo necesites.  No tiene que ser complicado o complejo, basta que cumpla con el objetivo de recordarte las cosas y que tenga una buena relación.

Haz uso de la tecnología

Utiliza otros medios, aunque no parezcan del todo convencionales. Puedes recurrir a una grabadora de audio o video para grabarte mientras memorizas una información, así podrás escucharla cuantas veces lo desees y aprenderás de una manera fácil y entretenida. Puedes probar con distintos aparatos y ver cuál es el que mejor te parece.

Visualiza 

Activa tu memoria muscular por medio de tu imaginación. Recurre a recrear escenarios en tu mente en los que vayas incorporando la información que desees aprender, verás cómo es más sencillo y rápido de hacerlo. Además puede ser divertido el hecho de que estás realizando conexiones con cosas que podrían ser de todo tipo.

Elige los materiales más importantes

Verifica que la información que tengas a la mano sea correcta, ya que no querrás memorizar algo incorrectamente, puesto que perderás tiempo y no te será útil a largo plazo. Pon a ejercitar esa materia gris para aprender más cosas.Recurre a internet para actualizar todos los conocimientos que deseas integrar a tu vida ¡no te arrepentirás!